Leer Crónicas urbanas de París Chiquito, de la autoría de Pablo Nicolás Véliz Sandoya, me resultó grato. Es un libro que habla de ese Vinces que no habito a diario, pero que está en mi memoria. Siempre pensé que me gustaría leer una obra que recogiera la historia cotidiana del pueblo y de su gente. No una que hablara, como siempre, de autoridades, de próceres y políticos, o de los terratenientes de la época de la pepa de oro, cuando Vinces fue bautizado como París Chiquito, sino una de la gente llana, que trata de construir el día a día con creatividad y se desempeña en diversos oficios. Un libro de historias. De personajes. De sabiduría popular. De costumbres y creencias. Y de los cambios sociales que se han ido gestando. Por ese motivo, cuando llegó a mis manos este libro, lo leí de inmediato.