Lo normal sería que los niños vayan a la escuela en lugar de trabajar, la educación es un derecho, sin embargo, no todos tienen acceso a ella. En lugar de asistir a la escuela, millones de ellos se encuentran trabajando en las calles. Y en la película Vidas de papel se representa parte de esa realidad del trabajo infantil, situación que es acompañada con otros aspectos, como el abandono, que llevan a la reflexión.