Los fanáticos de Feid no fueron los únicos que se gozaron los conciertos que ofreció en el país, el colombiano también disfrutó cada momento compartido con su público eufórico y es que los gritos del coliseo Voltaire Paladines Polo en Guayaquil y el coliseo General Rumiñahui en Quito se escuchaban hasta sus afueras y más allá.