La cantante española Amaia Montero, exvocalista del grupo La Oreja de Van Gogh, ha anunciado que volverá a la música en 2025.
“Desde esta ventana te puedo ver, ya casi estás aquí. Trátame bien, por favor, porque tus predecesores han sido muy duros conmigo. Cuídame y ayúdame porque va a ser bajo tu manto cuando vuelva a lo que más he echado de menos en estos años robados. Este 2025 vuelvo a la música”, ha escrito Montero este lunes, 30 de diciembre, en su cuenta de la red social Instagram.
Publicidad
Montero anunció en 2022 que tenía un nuevo disco en ciernes, una publicación que nunca se llegó a concretar, pues a finales de ese año Montero volvió a apartarse del foco público para cuidar su salud.
Su reaparición musical se produjo como una inesperada invitada en uno de los cuatro conciertos estelares con los que Karol G culminó su gira mundial en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid. El pasado 21 de julio, la Bichota presentó en el escenario de la gira Mañana Será Bonito a la española con las siguientes palabras: “Hoy tengo aquí a una personita que lleva dos años sin subirse a un escenario y está nerviosa, pero ustedes le van a regalar una de las mejores noches de su vida. Cuando la busqué le dije que su música acompañó atardeceres con mis amigos. ¡Ella es una reina!”, y así fue que delante de 60.000 personas las artistas cantaron Rosas, uno de los temas más representativos de Montero.
Publicidad
Las reacciones positivas de los medios y el público a aquella actuación en la que ambas interpretaron la canción Rosas, del repertorio de La Oreja de Van Gogh, comenzaron las especulaciones sobre el momento en el que Montero volvería a la actividad e incluso si volvería a cantar junto con su exbanda.
Ella misma llegó a comentar que este tipo de comentarios la estaban empezando a afectar, especialmente tras la igualmente inesperada salida de Leire Martínez, quien fue su sucesora en La Oreja de Van Gogh, por motivos aún no aclarados.
Martínez dijo el pasado octubre que abandonaba esta formación musical “después de mucho tiempo de reflexión y profundas conversaciones” en las que no han conseguido “acercar (sus) diferentes maneras de vivir el grupo”. (E)