Juan José Avilés se acercó a la escritura en un momento ‘fatalista’ de su vida. Era el 2018, por primera vez viajaba en avión, y pensaba que se iba a morir. Su pánico a las alturas fue tanto que antes del viaje escribió un testamento, en el que especificaba que sus guitarras se quedaban con su mejor amigo. “Cuando estaba por tomar el avión ya había hecho todo lo que me calmara la ansiedad, ya había escuchado música, ya había visto series por el celular, ya había hecho todo, y fue cuando dije voy a empezar a escribir”, cuenta.