Cuando una celebridad es invitada a una premiación tan importante como el Óscar, sabe que hará historia con su victoria, si es que fue nominado. O con su vestuario. Cada ceremonia se vuelve una declaración de moda, por lo que es imposible olvidar accesorios, trajes o vestidos que enamoraron nuestra atención o cuentan una historia.
Uno de esos vestidos memorables es el que usó la actriz Jennifer Lawrence, hasta ahora catalogado como el vestido más caro usado en una ceremonia de la Academia.
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Se trata de un diseño en color crema con una voluminosa falda. Es obra del diseñador Raf Simons para Christian Dior Haute Couture y fue uno de los looks finales de su colección esa temporada. Jennifer Lawrence ha contado que no le hicieron muchas pruebas, simplemente se lo probó la mañana de la ceremonia y le quedó bien.
Se dice que el vestido vale entre cuatro y cinco millones de dólares. En ese momento, Jennifer Lawrence había firmado un contrato de tres años con la marca, valorado en 15 millones de dólares, y como parte del acuerdo solo usaría Dior en eventos de alfombra roja. (E)