Su autenticidad no solo radica en su apellido, que se escribe con ese y no con zeta, como tradicionalmente se conoce, sino también en su renovada manera de ver la vida y aceptarla con sus claros y oscuros, y con menos “tumulto”. La paz que afirma estar experimentando a sus 33 años la actriz y comunicadora Pamela Sambrano no es una mera coincidencia: es el resultado de un proceso que empezó el 12 de abril de 2021 con la visita a un psiquiatra, y continúa día a día con voluntad, esmero y disciplina.