Zulinka Pérez, hija del fallecido cantante Rubby Pérez, reveló en una entrevista con Lourdes Stephen (de Telemundo) que su padre presintió su muerte, días antes del devastador derrumbe de la discoteca dominicana Jet Set, donde ofrecía un concierto.
“Estaba en el balcón regando las matas de mi mamá y me dijo: ‘Seguiré luchando mientras tenga vida por mis hijos’”, recordó Zulinka, quien vivía con él. “Dijo que daría la vida por sus hijos... lo presentía”.
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La descendiente ha contado a los medios cómo ocurrió el momento fatal en el centro de entretenimiento, cuando el intérprete tomó el micrófono que su hija no podía usar por estar recién operada. “El público pedía la canción Color de rosa y le dije que no podía cantarla. Él me cuidó hasta el final”, relató. “Todo pasó tan rápido, no me dio tiempo de sostenerlo. Todo le cayó encima. No lo vimos más. Estamos destrozados”.
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Zulinka ha recordado además que su padre llevaba una vida tranquila y familiar desde la pérdida de su esposa, fallecida de cáncer hace dos años. “Su vejez era mía, él me decía que quería pasarla a mi lado”, afirmó. Asegura que Rubby estaba saludable y fuerte: “A sus 69 años decía que estaba duro como un roble”.
Conmovida, también evocó la relación cercana que compartían: “Él me decía ‘te amo’, me contaba sus cosas. Yo era su fuerza y él era la mía. Fue mi guía y mi orgullo”. Con 23 años trabajando juntos, Zulinka expresó el profundo amor que siente por su padre: “Puedo caminar con la frente en alto y decir que ese fue mi papá. Si hay un más allá, lo seguiré amando allá también”.
La noticia de la muerte del artista, más conocido como ‘la voz más alta del merengue’, fue confirmada por su manager Enriquito Paulino, pasadas las 17:00 (hora local) del martes 8 de abril. El artista había fallecido atrapado entre los escombros, así como 220 personas más (incluyendo dos ex jugadores de la MLB, Octavio Dotel y Tony Enrique Blanco Cabrera), informó el Centro de Operaciones de Emergencia (COE). Además 189 personas resultaron heridas. (E)
