Qué otra sopa nos une tanto a los ecuatorianos como el encebollado. Es el brunch (desayuno - almuerzo) por excelencia de los fines de semana, el remedio para el chuchaqui y una buena dosis de vitaminas para quienes se sienten cansados o desganados. Esta sopa los hace revivir (o eso sienten). Es económico, contundente y rendidor. Y según la plataforma Taste Atlas el encebollado es una de las mejores sopas del mundo, alcanzando un honorable segundo lugar de un total de 10 puestos.