La saga de Rápidos y Furiosos, que comenzó en el 2001, parece tener el desafío constante de superar los niveles de acción, locura y excentricidades en cada entrega que llega a los cines. La octava parte, The Fate of the Furious (2017), cerró con los protagonistas luchando contra un inmenso submarino nuclear en medio del blanco paisaje polar, mientras que en la séptima película (Furious 7, 2015) los personajes interpretados por Vin Diesel y Paul Walker (+) saltaron en un lujoso automóvil deportivo entre los elevados pisos de tres rascacielos de Abu Dabi (¡aún nos preguntamos cómo grabaron esa escena!).