Claudia Nascimento, una mujer afrodescendiente y de clase media, huye de su pareja luego de ser víctima de violencia e intento de femicidio. Esas vivencias serán el contenido de un libro que escribe desde el anonimato y que la conectarán con Lázaro Samaniego, otro sobreviviente de este tipo de abusos, que se narran en El silencio tiene rostro de mujer, ópera prima del quiteño Jarson Wayans.