En 1975, un joven Steven Spielberg despertaría uno de los miedos más frecuentes de las personas que se encuentran en las playas. Fue el inicio de una de las franquicias que daría lugar a otras sagas, pero con otras bestias como protagonistas: dragones, gorilas, cocodrilos, anacondas, pirañas, en fin, toda una alegoría de criaturas que han aglutinado millones de fans en todo el mundo.