Cuando Ruth Handler, esposa del cofundador de Mattel, pensó en cómo quería que fuera la muñeca que estaba creando, estaba segura de tres cosas: quería que la muñeca sea realista, que siga la moda y las tendencias, y que sea entendible para los niños y niñas que jugaran con ella. Así nació Barbie, en 1959, con una figura esbelta, cabello rubio y un ajustado traje de baño al estilo cebra.