Cuando se habla de niños millonarios a muchos se le viene a la cabeza la figura de Ricky Ricón, el niño de la ficción más rico del mundo, que en el cine fue interpretado por el carismático actor estadounidense Macaulay Culkin, en 1994. Ya en la realidad los menores que hoy tienen una gran fortuna gracias a sus padres son varios, aunque quizá no equiparable a la de Ricón.