Xavi y Laporta llegaron a una conclusión tras la ‘cumbre’ que mantuvieron nada más acabar el partido ante el Inter y con el equipo prácticamente abocado al abismo en la Champions: la prioridad absoluta de cara a esta temporada es el título de Liga. Cualquier otro título, sería considerado un éxito si viene ratificado por el campeonato doméstico, pero la exigencia para este año es ganar LaLiga. De ahí que el propio Laporta tranquilizara a Xavi respecto a la más que posible eliminación en la Champions: el objetivo era llegar a cuartos de final, pero en ningún caso se había planteado la conquista de este torneo de cara a esta temporada. Eso sí, le recordó que caer en la fase de grupos, por segundo año consecutivo, era un golpe duro, tanto a nivel deportivo como económico.