Universidad Católica consiguió su primer triunfo en Copa Sudamericana, en casa, por 2-0 ante Banfield, resultado que deja a los dirigidos de Miguel Rondelli a la cabeza del grupo C, estando pendiente el juego entre Unión La Calera y Santos.

Goles del panameño Ismael Díaz (minuto 52) y el colombiano Cristian Martínez (54 minutos) sentenciaron el juego a favor de los santos, que en el minuto 74 se quedaron con diez jugadores por la expulsión de Arón Rodríguez (74 minutos), que entró al cambio y estuvo apenas siete minutos en cancha.

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Esa expulsión fue, a criterio del estratega, un punto de inflexión en el encuentro, al que dividió en “dos momentos”: una primera parte hasta la salida de Rodríguez, lapso en el que “destaco el hambre que tuvo el equipo para buscar el resultado”; y, luego, al quedarse con diez jugadores, “donde prevaleció el orden para defender el marcador. El equipo se comportó bien en las dos facetas”, indicó.

“Me alegra ver al equipo no traicionar un estilo de juego”, apuntó el entrenador argentino. “Planteamos nuestro estilo y estamos compitiendo de igual a igual con todos los equipos, aunque es difícil sostener un nivel de juego cuando se juega miércoles y domingo, pero estamos peleando; aún hay LigaPro para nosotros (cuarto, a cinco puntos del liderato) y todavía tenemos Copa”, señaló Rondelli.

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Otro punto destacado por el estratega fue llegar con los santos a sumar seis partidos consecutivos con goles a favor.

“Me deja contento que en los últimos partidos el equipo haya encontrado esa efectividad en el último tercio; eso es bueno”, remarcó el estratega, aunque aclaró que “la producción ofensiva del equipo siempre ha sido buena, hemos convertido en casi todos los juegos, siempre el equipo propone y vamos por el resultado”, dijo.

Los santos regresan a la LigaPro este domingo, con visita a Orense (14:00), mientras en Sudamericana reaparecerá el 5 de mayo, cuando reciba a Santos FC. (D)