No caigamos en el pecado de hacer conclusiones definitivas sobre el rendimiento de nuestra Selección luego de la doble fecha de la eliminatoria. Ni tanto que queme al santo ni tan poco que no lo alumbre. Tratemos de colocarnos en el punto del justo equilibrio luego de dos encuentros tan disímiles como los sostenidos ante Argentina y Uruguay, dos favoritos para lograr un cupo a Catar 2022. En la fecha inicial se encontraron dos selecciones temerosas. Argentina, cegada por el compromiso de lograr los tres puntos en el arranque, y Ecuador, mostrando temor reverencial ante un rival de lujo, que tiene en sus filas al mejor jugador del mundo y a varios futbolistas de clubes de gran poderío en Europa, cotizados en decenas y cientos de millones de dólares.