Es uno de los más grandes talentos futbolísticos de la historia de Italia, en la Juventus de Turín es considerado “un emblema y leyenda viviente de la institución” y “con su dorsal número 10 regaló tardes gloriosas a sus aficionados, y por todos será recordada su clase con el balón, así como su especialidad en los tiros libres”. Y por si fuera poco, el genial Alessandro del Piero se consagró campeón del mundo con la squadra azzurra en Alemania 2006.