EFE
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De proveedor oficial de las principales monarquías europeas a finales
del siglo XIX, al más profundo de los olvidos. Ésta es la historia de la
familia Smirnov, siervos de la gleba que amasaron una de las mayores
fortunas de su tiempo con la producción y venta de la bebida rusa por
excelencia: el vodka.