EFE
LOS ÁNGELES, EE.UU..- Sylvester Stallone, ícono del cine de acción de Hollywood durante las últimas tres décadas, cumplió ayer 65 años en la cúspide de una industria incapaz de jubilar a uno de sus ídolos más queridos, aún en plena forma y dispuesto a seguir repartiendo golpes pese a la edad. El boxeador Rocky Balboa y ese veterano de Vietnam, Rambo, personajes más célebres del actor, a quienes encarnó hasta en diez ocasiones (seis entregas del primero, la última en el 2006; cuatro del segundo, la última en el 2008), andan de celebración.