No puede hablar durante unos 4 días, ni podrá comer nada fuerte, pero la operación fue un éxito, según aseguró hoy el médico que operó a Jorge Luis del Hierro.
Alrededor de las 12:00 terminó la operación en el quirófano de la clínica Kennedy.
Publicidad
El sábado pasado, mientras se preparaba para ponerle voz al tema No lo cambio por nada, en los estudios Borkis Entertainment, de Jorge Luis Bohórquez -su productor-, el artista sintió serios malestares en la garganta. Estos ya lo venían aquejando, pero él había tratado de soportar para concretar la grabación del sencillo con el cual regresaría a los escenarios luego de un año de receso.
En su momento Del Hierro y Bohórquez señalaron como necesario el tiempo que se tomó para descansar y producir un nuevo disco, pues entre el 2005 y el 2007 el intérprete prácticamente no tuvo descanso. Esto por el apogeo que registró su carrera con la presentación del single Prisionero, compuesto por cinco temas, y el álbum homónimo de doce canciones que promocionó en su totalidad.
Publicidad
"Su descanso siempre fue aparente, porque aunque no ofrecía presentaciones masivas, sí tuvo shows en varias ciudades del país", anotó Enrique García, de Borkis Entertainment. Entre el lunes y ayer, Del Hierro se practicó los exámenes previos a la operación. Los resultados no fueron divulgados, pero según García, la intervención quirúrgica se hizo eminente "para evitar consecuencias lamentables".
Tras la operación, que estuvo a cargo del cirujano Johnny Ramos, se deberá esperar -entre 15 a 20 días- la evolución del artista. "Confiamos en que todo sea positivo, pues para él su carrera es muy importante. Pero nadie, ni los mismos especialistas, pueden prever un retiro. Esto está en manos de Dios", anotó García y recordó que Del Hierro siempre ha manifestado ser muy creyente.