La estancia de los actores Brad Pitt y Angelina  Jolie en Namibia, donde desean que nazca su primer hijo biológico, está  levantando una polvareda de críticas ya que el Gobierno, deseoso de proteger a  toda costa su privacidad, no ha dudado en emitir una orden de expulsión contra  varios paparazzi .

La célebre pareja de actores, acompañados por sus dos hijos adoptivos,  llegaron hace casi un mes a Namibia, país semidesértico de África austral, y  han previsto quedarse hasta que la actriz, embarazada de ocho meses, dé a luz.

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Su llegada ha arrastrado consigo una nube de paparazzi que les persiguen  sin tregua en su refugio a orillas del mar, en Swakopmund (oeste), cuya  elección parece haber sido premeditada.

"He aprendido mucho y quiero que mis hijos aprendan lo mismo y crezcan en  el mundo tal y como es, no solamente en un pequeño rincón que no representa a  todo el planeta (...) Por eso viajamos tanto", comentó recientemente la actriz,  embajadora de buena voluntad de Naciones Unidas, durante una conferencia de  prensa telefónica.

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La presencia de los enamorados atrae a la prensa del corazón de todo el  mundo.

Hubo ya enfrentamientos entre fotógrafos y tres guardaespaldas de la  pareja, que cuenta con todo el apoyo del Gobierno para la defensa de su vida  privada.

Como prueba de su buena voluntad, el gobierno namibio ha ordenado a tres  fotógrafos franceses y a un sudafricano que abandonen el país.

La Sociedad Nacional de Derechos Humanos de Namibia (NSHR) ha intervenido  para denunciar tanto el comportamiento de los guardaespaldas como el de la  policía que, según ella, "llevó a cabo registros injustificados en casas de  residentes en busca de paparazzi y periodistas".

"Condenamos estos métodos brutales dirigidos de manera selectiva contra los  (habitantes) locales y algunos periodistas extranjeros", señaló la organización  namibia defensora de los derechos humanos en un comunicado publicado en  Windhoek.

Una periodista namibia, Donna Collins, declaró a la AFP haber presenciado  la semana pasada registros de viviendas en la estación balnearia de Langstrand,  cerca de Swakopmund.

La policía niega las acusaciones. "No se ha confiscado ninguna cámara  fotográfica ni se ha brutalizado a ningún periodista", aseguró el  portavoz de la policía namibia, Hieronymus Goraseb.

En una declaración con fecha de 24 de abril, Loini Katoma, secretario  permanente del ministerio de Información namibio, afirmó que el Gobierno "se  siente constitucionalmente obligado a proteger no sólo la vida privada de sus  ciudadanos, sino también la de los visitantes".

El jueves, el embajador de Namibia en Washington, Hopelong Ipinge, afirmó  que la presencia de Brad Pitt y Angelina Jolie en su país constituye una  formidable oportunidad publicitaria que ya está dando fruto.