La primera vez que Rocío Dúrcal visitó el Ecuador, en marzo de 1984, contó a EL UNIVERSO que uno de sus hermanos, Tomás de las Heras, vivió y murió en Guayaquil el 14 de julio de 1982. Sus restos reposan el panteón de la Sociedad de Beneficencia Española del Cementerio de la Junta de Beneficencia.