El nuevo ministro de Trabajo, Galo Chiriboga, aseguró ayer que no realizará cambios sustanciales en las políticas que aplicaba su antecesor, Raúl Izurieta Mora-Bowen, quien le entregó ayer el despacho del Ministerio.

“Me encanta escuchar al doctor Chiriboga”, señaló el ministro saliente, “ya que con él me une una amistad de mucho tiempo”, añadió.

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Y no solo que Chiriboga continuará con las políticas del anterior funcionario, sino que aseguró impulsará “los buenos proyectos que se venían desarrollando en esta Cartera de Estado”.

Explicó que los proyectos tienen que ver con materia administrativa, convenios con organismos internacionales, mejoramiento de la prestación de servicios en el Ministerio de Trabajo, la creación del Consejo Nacional Laboral, entre otros.

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“No queremos refundar el Ministerio, ya que cuando hay buenas iniciativas la responsabilidad de los administradores debe ser continuar con esos proyectos, pero también tener la honestidad de reconocer la autoría de quien los inició”, dijo.

Al ser consultado si fiscalizará la labor de Izurieta, Chiriboga, afirmó que “no soy fiscalizador; soy un ejecutor de tareas y obras; he visto los proyectos de la anterior administración y los comparto plenamente. Tendré diferencias políticas, pero no puedo desconocer el valor de esa gestión”.

Con relación a los esquemas de tercerización laboral y de los contratos por horas, el ministro Chiriboga expresó que está de acuerdo con estos sistemas, en la medida en que no afecten los derechos laborales.

“Son mecanismos adecuados para mejorar la gestión de las empresas, pero no deben servir como instrumentos para evadir responsabilidades laborales”, manifestó.

En la ceremonia también fue presentada Betty Amores, como nueva subsecretaria del Trabajo.