El grupo quiteño cuenta con una sólida carrera de nueve años. Es el número 1 en el Top 20 de MTV.

Cuesta un poco creer que el cuarto de la lavadora, en la casa del baterista Juan Posso, sea el cuarto de ensayos de Muscaria, la banda que pelea los primeros lugares de popularidad en Latinoamérica, con el video Afecto alterado. Muscaria puso a rodar este video en MTV Latinoamérica, desde septiembre anterior. Un mes más tarde empezó el boom. Primer lugar entre los cinco más pedidos, luego en los 10 y, hace una semana, el número 1 en el Top 20, el más difícil. Lo mejor, con votación del público.

Llevan el estandarte del país. Muestran imágenes de ellos tocando, intercaladas con el rótulo del camino a Toctiuco, el túnel de San Juan, la Virgen del Panecillo. Desde que los guayaquileños Blaze ganaron un premio, ninguna otra banda ecuatoriana había logrado calar en ese canal internacional de música. La fama viene por la potencia de la garganta de Luis Fernando Cordovez.

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Luigi es el vocalista y bajista. Es el líder que grita, carraspea, arrastra sentimientos encontrados (revolcándolos, pulverizándolos, y volviéndolos a poner en escena). “No sé cuánto más puedo aguantar/ la esperanza en mi cuerpo.../”. Así canta en Afecto alterado.  Pero el rock no es nada fácil. Muscaria cuenta con una sólida carrera de nueve años. Solo cuatro años después de sus primeras tocadas, su primer disco Combatiendo apatía fue toda una bomba, con Vamos mi raza y Fuerza policial (gorila) como su emblema.

En ese tiempo, Luigi estaba acompañado por Nicolás Cavallero (batería) y Álex Caicedo (guitarra). Dos años después, Nico se fue a vivir a Estados Unidos y Álex a Chile. Solo bastó hurgar entre los amigos skaters para reclutar al bataquero Juan Posso y Jason de la Vega, los actuales integrantes de Muscaria. Con esta nueva alineación, Muscaria volvió a grabar otro disco. Movimiento apareció en el 2001, allí la banda de power hard core experimentó una evolución.

Jason empezó a experimentar con sonidos basados en efectos de distorsión y wah con una pedalera RP14 Digitec y una guitarra Gibson Les Paul. La garganta de Luigi maduró y llega a gritos estremecedores y contundentes.
Juan quitó el brillo en los matices de su batería. Obtiene un sonido profundo, ambiental. Plaf: el resultado fue un sonido más fuerte, rozando entre lo trascendente y lo estridente.

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Ahora ha realizado una edición de colección: el EP Conductor de comportamiento, con seis canciones, dos de ellas en vivo tocadas en el festival bogotano Rock al Parque, del 2002 (hay una poderosa versión del clásico Soy un macarra, de Ilegales). Muscaria realizó una gira nacional, y en medio de su gira sudamericana, se dieron tiempo para tocar en el Quito Fest, por las fiestas capitalinas. Los vecinos de La luz no se han molestado, apenas llevan practicando un mes en el cuarto de la lavadora. Quizás no saben que esa banda dejó mordiendo el polvo a los millonarios Metallica, Limp Bizkit o Cold Play, en el Top 20 de MTV.