Existe una línea superfina entre conocimiento científico y conocer algo empíricamente. Existe igualmente una línea muy fina entre el uso y aplicación correcta de los pesticidas y la degeneración agrícola.
Estamos bombardeados con propaganda de productos naturales y orgánicos que enfatizan que lo hecho por el hombre es malo, y lo natural es bueno. Es mejor aclararlo. Increíblemente, lo químico es más tóxico para los humanos, y lo mejor son los completamente naturales; desafortunadamente existen evidencias de que el uso de pesticidas naturales en la producción agrícola es igual de tóxico que el uso de pesticidas sintéticos; que un producto orgánico, al contrario de lo que mucha gente piensa, no significa libre de ingrediente químico. En muchos países las leyes permiten en los cultivos orgánicos rociar una variedad de químicos para evitar pérdidas en las cosechas. Un producto orgánico es aquel derivado de fuentes naturales y no de sintéticos. También en los suelos donde se cultivará orgánicamente no pueden haber recibido algún químico sintético durante los tres años previos, y tienen que ser aplicados con equipos que no hayan usado un pesticida sintético en los últimos tres años.
Cuando fueron analizados los químicos sintéticos como causales del cáncer, encontraron que la mitad de estos son carcinogénicos. Fue solo hace poco tiempo que se empezó a investigar sobre los pesticidas orgánicos, y sus resultados fueron impactantes, se encontró que de igual forma el 50% de estos producirían cáncer. Debemos ser más prudentes y dejar de aceptar que todo lo natural es inocuo e inofensivo. Es indiscutible que el uso de pesticidas orgánicos provoca un impacto menor en el medioambiente, también que muchas prácticas orgánicas de campo han contribuido a la reducción del uso de pesticidas para combatir plagas; desafortunadamente estos métodos no químicos no proveen suficiente protección para que sea una actividad rentable, y se hace necesario usar pesticidas químicos. No existe algún tipo de garantía de productos con etiquetas de orgánicos, de que no hayan recibido un control químico adicional en el campo. Usted debe considerar además del uso del químico a espalda suya, la diferencia de precios entre un tomate orgánico y otro.(O)
Pedro Álava González, ingeniero agrónomo; Sunrise, Florida, EE.UU.