Jonathan Gabriel Sánchez Criollo, de 21 años, y Josselyn Katherine Hernández Basurto, de 19, fueron asesinados mientras se movilizaban en un automóvil, en Huaquillas, cantón fronterizo de la provincia de El Oro.
El ataque ocurrió la madrugada de este jueves, 16 de enero, en la intersección de las calles Eugenio Espejo y Zaruma, en la ciudadela José Mayón.
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Según los primeros informes, alrededor de la 01:20, un grupo de hombres armados interceptó el vehículo de la pareja y abrió fuego en su contra.
Sánchez intentó acelerar para escapar del ataque, pero las balas le impidieron maniobrar y el auto quedó inmovilizado en medio de la calle.
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Los vecinos del sector relataron que escucharon más de 20 detonaciones. Al salir de sus casas, ellos encontraron la aterradora escena: los cuerpos sin vida de Sánchez y Hernández dentro del auto.
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La Unidad de Criminalística se encargó de levantar 22 casquillos de bala, calibre 9 milímetros, y tres proyectiles deformados.
La inspección ocular inicial confirmó que ambos jóvenes presentaban heridas de bala en la cabeza y el torso.
Los cuerpos fueron trasladados al centro de ciencias forenses en Machala, donde se les practicará la autopsia correspondiente.
Versiones preliminares señalan que Sánchez había regresado recientemente a Huaquillas desde Loja, donde residía. Allá habría recibido amenazas meses atrás. Su visita tenía como propósito retirar un vehículo que dejó en reparación durante las festividades de año nuevo.
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Por su parte, Hernández, quien era madre y vivía separada de su pareja, habría recibido amenazas de muerte. Este dato, revelado por allegados, es analizado por la Policía como una posible línea de investigación.
Familiares de ambos jóvenes se vieron devastados ante lo ocurrido. En un informe policial se mencionó que Jonathan Sánchez había recibido amenazas que lo obligaron a mudarse, pero nunca imaginó que su regreso sería fatal. (I)