Joel Williams Cuenca Quiñónez, de 36 años, fue asesinado a pocos minutos de finalizar la noche del domingo 20 de abril en el sector Lomas de Franco, en el sur de Pasaje, en la provincia de El Oro.
Según la principal hipótesis, el crimen podría estar vinculado a posibles conflictos personales o profesionales, aunque hasta el momento no se ha confirmado una motivación clara.
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La víctima era abogado de profesión y registraba un antecedente penal por abuso de confianza.
El hecho ocurrió pasadas las 23:45 dentro de una sala de billar privada ubicada en su propio complejo deportivo.
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Joel estaba en compañía de amigos, compartiendo bebidas tras un partido de ecuavóley. En ese momento, sujetos armados irrumpieron en el lugar y descargaron una ráfaga de disparos que acabaron con su vida de forma inmediata.
Personal de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida (Dinased) se trasladó al sitio tras la alerta del ECU911. Al llegar, encontraron el cuerpo boca arriba con múltiples heridas causadas por arma de fuego: un disparo en la mandíbula, dos en el abdomen y otras heridas distribuidas en el torso.
La escena fue acordonada y procesada por Criminalística, que recolectó 20 vainas percutidas y cinco balas deformadas calibre 9 mm.
Tras la verificación, el fiscal de turno dispuso el levantamiento del cuerpo y su traslado al centro forense para realizar la autopsia correspondiente. La sala donde ocurrió el ataque fue clausurada temporalmente para fines investigativos.
Un pariente del ahora occiso contó que Joel estaba compartiendo con amigos tras un encuentro deportivo y que desconocía si tenía enemigos o amenazas. “Solo llegaron y lo mataron”, expresó consternado.
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La Policía aún no determina con certeza el móvil del crimen, pero no descarta ninguna línea de investigación, incluyendo un posible ajuste de cuentas o represalias derivadas de su labor profesional.
Joel Cuenca habría defendido anteriormente a personas vinculadas con actividades ilícitas, lo que podría haberlo puesto en la mira de organizaciones criminales, indica un extracto policial.
Vecinos de la zona aseguraron no haber visto a los atacantes, pero se presume que huyeron en un vehículo que los esperaba a pocos metros del lugar.
Las cámaras de seguridad del sector están siendo analizadas por personal de inteligencia para identificar a los sicarios. (I)