Una masacre y dos alertas de explosivos en tres puntos cercanos del suburbio de Guayaquil han causado zozobra entre pobladores y movilizado a equipos policiales entre la noche del miércoles y mañana de este jueves.
En una primera alerta, sujetos armados ingresaron a una vivienda para atacar a un grupo de personas que estaban en su interior, en el suroeste de Guayaquil.
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Este hecho violento se produjo pasadas las 20:00 del miércoles anterior.
En total cuatro personas, incluyendo una mujer de 70 años, murieron en el sitio y otra quedó herida y fue llevada a una casa de salud. Su pronóstico era reservado hasta esta madrugada.
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En la escena se levantaron más de 19 indicios balísticos.
La Policía atribuye que este ataque estaría motivado por una disputa entre bandas que buscan tomar el poder del expendio de drogas en la zona.
Días atrás, dos eventos más se dieron en calles cercanas: en un caso, una niña de 4 años murió como víctima colateral y en el otro evento hubo tres asesinatos.
“Esto nos hace ver una lucha entre dos grupos delictivos; estamos desarrollando las investigaciones del caso”, sostuvo Édison Molina, jefe del distrito Portete, al atribuir que estos hechos se motivan por el tráfico y expendio de droga.
Justamente, horas después, cerca de la medianoche, un explosivo fue dejado y detonó en las calles Nicolás Augusto González y la 26. Ahí hubo daños materiales en al menos una vivienda.
Además, en la escena quedó abandonado otro presunto artefacto explosivo que fue levantado por personal especializado de la Policía.
Testigos informaron que en el sitio se evidenció la presencia de un panfleto que mencionaría que ese evento sería en represalia por la muerte de la adulta de 70 años.
Horas después, pasadas las 09:00 de este jueves, a dos cuadras, en la calle Augusto González y la 28, moradores se alarmaron por un objeto de similares características al abandonado en la calle 26.
Por ello fue necesario el despliegue nuevamente de equipos antiexplosivos y se limitó el paso vehicular dos cuadras a la redonda. Se espera que el personal especializado verifique si se trata de un artefacto peligroso.
Entre moradores se mantenía hermetismo respecto de estos hechos.
En varios allanamientos recientes, la Policía ha realizado varias detenciones de sujetos e incautaciones de armas y sustancias sujetas a fiscalización. (I)