La tarde de este martes 18, la Policía Nacional logró la liberación de una joven que permanecía en calidad de secuestrada desde el viernes anterior en Guayaquil.
Antes del plagio, la ciudadana, de 29 años, había llegado a la urbe desde Ibarra por trámites de pasaporte y se había reunido en la casa de una amiga en el norte de Guayaquil.
Luego, alrededor de las 22:00 del 15 de abril, solicitó un taxi informal a través de un aplicativo móvil.
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Después de subirse al automotor, el chofer avanzó unos cien metros por la avenida Orellana y, de manera repentina, otros dos sujetos se subieron al vehículo, le apuntaron con un arma de fuego y después le amarraron las manos y le vendaron los ojos.
Al día siguiente, los antisociales se contactaron con los familiares para exigirles $ 30.000 por la liberación de la joven, según refirió el general William Villarroel, jefe policial en la Zona 8.
Luego, el ECU911 recibió una llamada de auxilio sobre esta novedad y la Policía inició las indagaciones con su unidad especializada en secuestros.
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Después de los análisis y diligencias investigativas, esta tarde se dio la aprehensión de cuatro ciudadanos, uno de ellos dominicano, que tendrían relación con este delito. Además se retuvo a tres ecuatorianos de 19, de 21 y de 37 años.
Inicialmente se dio la aprehensión del extranjero Jairo A. en la Bahía, y luego la de los otros tres ciudadanos locales, que se encontraban en una vivienda alejada, en el sector del Daular, vía a la costa.
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En el cuartel Modelo, esta noche, la mujer se reencontró con familiares y agradeció el trabajo de la Unidad Antisecuestros y Extorsión (Unase) por este rescate.
“La persona que organizó todo esto me conocía perfectamente”, dijo la víctima.
Villarroel recomendó que los ciudadanos limiten la información que se comparte en redes sociales y de la misma manera con personas de su entorno, como trabajadores o colaboradores. (I)
