¿Crisis institucional? ¿Son los oficiales de alto rango cómplices o encubren los ilícitos de sus subordinados? ¿Hay corrupción generalizada? Son parte de muchas interrogantes que retumban en la opinión pública respecto a tres acontecimientos reñidos con la Ley, ocurridos la semana del 19 al 23 de septiembre, en los que están involucrados uniformados de la Policía Nacional, la institución llamada a velar por la paz y seguridad ciudadana.