El próximo debate presidencial entre Luisa González, de la alianza Revolución Ciudadana-RETO, listas 5-33, y el presidente-candidato Daniel Noboa, por el movimiento Acción Democrática Nacional (ADN), lista 7, está programado para este 23 de marzo. El encuentro será transmitido en cadena nacional y estará moderado por la periodista Ruth del Salto en los estudios de Ecuador TV.

El Comité Nacional de Debates definió cinco ejes temáticos: educación, salud y seguridad social, criminalidad y seguridad, economía y empleo, y gobernabilidad. Estos temas surgieron de un proceso participativo que involucró alrededor de 2.000 sugerencias que fueron procesadas por los comisionados.

Gabriela Castro Pérez, periodista y miembro del Comité Nacional de Debates, explica que en el proceso participaron ciudadanos de distintos sectores, representantes de varias organizaciones políticas nacionales y también medios de comunicación.

“Los resultados fueron claros: la seguridad y justicia se posicionaron como la principal preocupación de la ciudadanía, seguidas de la situación económica, corrupción y transparencia, salud y educación”, señala Castro.

Además, menciona que recibieron aportes de organizaciones como la Coalición Movilidad Segura, la Federación Ecuatoriana de Enfermedades Raras o Poco Frecuentes (Ferpof) y la Asamblea del Sistema de Educación Superior (Asesec).

Según Giuseppe Cabrera, analista político, “los temas responden en gran medida a las necesidades y urgencias que el ecuatoriano reflejó en las diferentes encuestas de opinión”.

Sin embargo, Cabrera identifica una omisión crucial: la política exterior. “Hay un tema relevante en el contexto actual, que es el de política exterior. Es indudable que en el contexto actual de la guerra comercial de Estados Unidos con China y los errores que cometió el actual canciller (Marco Rubio)... un error político exterior puede significar una grave crisis económica”, señaló Cabrera.

Por su parte, Stephanie Macías, también analista política, menciona que la dolarización ha emergido como un tema crítico tras recientes declaraciones de Paola Cabezas, asambleísta por la Revolución Ciudadana, y no se ha considerado en la lista. “La dolarización tomó un papel preponderante en este debate posdeclaraciones... porque normalmente la narrativa siempre ha sido sobre si llega un eventual Gobierno correísta se pondría en duda (la dolarización)”, explicó.

Castro reconoce que algunos temas quedaron fuera: “Barajamos otros temas que lamentablemente se quedaron fuera porque tuvieron mayor votación en la encuesta”. Temas como la migración y la política exterior son algunos de ellos.

Los analistas expresan, asimismo, preocupaciones sobre la estructura del debate, particularmente sobre el componente de las preguntas cerradas definidas por el Consejo Nacional Electoral (CNE).

Cabrera advierte que “la política no es una operación matemática... Las respuestas son complejas”, y que “es un camino intermedio, donde nunca está dentro del sí o el no, ni en el blanco o negro, sino en escala de grises”.

Macías refuerza esta crítica señalando que “cuando hay una pregunta de sí o no y es tan cerrada, el candidato no tiene margen de maniobra”. Además, observa que la estructura limitada no permite la interacción que “uno anhelaría entre candidato y candidata”, lo que reduce el evento a “una presentación de ideas por turnos” en lugar de un verdadero debate de propuestas.

Castro destaca que es un elemento interesante del formato “porque van a tener la oportunidad de confrontar esas posturas que ellos tienen”.

Destaca que un debate sirve para poner incluso hasta los temas “incómodos” sobre la mesa, donde tendrán dos propuestas de gobierno que “se van a enfrentar, por lo cual los ciudadanos van a poder contrastar aquello”.

A pesar de las limitaciones estructurales y temáticas del debate presidencial, Castro enfatiza que este sigue siendo un instrumento fundamental para la democracia ecuatoriana, y ofrece un espacio donde los candidatos deben enfrentar temas urgentes y exponer sus visiones bajo escrutinio directo.

“Más allá de las propuestas o de los discursos que nosotros podamos escuchar este domingo, 23 de marzo, aquí la responsabilidad final recae en cada uno de nosotros. Participar, informarnos, reflexionar sobre lo que aquí se discuta es medular para tomar una decisión consciente en la urnas. La democracia no solamente se construye con elecciones, sino también con un ejercicio informado sobre nuestros derechos”, enfatizó. (I)