El caso Odebrecht en Colombia se tiñó de sangre. Lo han marcado tres muertes que ocurrieron a fines de 2018, mucho después de que se conociera el pago de millonarios sobornos de la constructora brasileña en varios países de la región en diciembre de 2016. Con una carambola adicional, un asesor del grupo asociado con la multinacional en su mayor obra, Néstor Martínez Neira, se convirtió en fiscal de la Nación a partir de agosto de ese mismo año.