El sufragio de este domingo, 15 de octubre del 2023, es la cúspide de un proceso electoral atípico, ensombrecido con asesinatos y violencia que antes no se habían visto. El resultado pasará a la historia sin importar cuál de los dos candidatos finalistas gane las elecciones. Si triunfa Luisa González, del movimiento correísta Revolución Ciudadana (lista 5), se convertirá en la primera mujer presidenta electa en las urnas; pero si vence Daniel Noboa, de la alianza Acción Democrática Nacional (ADN, listas 4-35), a sus 35 años de edad se convertirá en el presidente más joven que haya tenido Ecuador.
Luisa González, cercana al expresidente Rafael Correa, ofrece retomar los programas y medidas que implementó el Gobierno del líder de la Revolución Ciudadana. En tanto, Daniel Noboa, primogénito del empresario bananero y cinco veces candidato presidencial Álvaro Noboa, plantea administrar el país con participación del sector privado.
Resultados electorales se podrán conocer a partir de las 18:00, calcula el CNE
Las elecciones extraordinarias de este año surgieron como consecuencia del enfrentamiento político entre el Gobierno y la Asamblea Nacional. Además, en contexto, Ejecutivo y Legislativo compartían una baja aceptación ciudadana.
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El presidente Guillermo Lasso, acorralado por un juicio político que buscaba su destitución, el 17 de mayo activó la muerte cruzada y disolvió a la Asamblea, que lo juzgaba por presuntos actos de corrupción. Así se adelantaron las elecciones, que normalmente debían realizarse en el 2025.
Lasso puso fin a su administración de manera inesperada, a dos años de haber asumido el cargo que tanto buscó desde las presidenciales de 2013.
¿Cuándo dejará Guillermo Lasso la Presidencia de la República?
El Consejo Nacional Electoral (CNE) convocó a elecciones el 24 de mayo. Ocho binomios quedaron oficialmente inscritos para la primera vuelta del 20 de agosto. La Policía Nacional ofreció resguardo a todos los candidatos presidenciales, pero siete aceptaron.
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En julio, dos muertes conmocionaron a la población. El 16 de ese mes, delincuentes mataron a Rider Sánchez, candidato a asambleísta de Esmeraldas por la alianza SUMA-Avanza. Luego, aunque no participaba en la carrera electoral, el día 23 fue asesinado el alcalde de Manta, Agustín Intriago, víctima de un ataque armado en el barrio 15 de Septiembre.
La violencia escaló a niveles insospechados. La tarde del miércoles 9 de agosto, el país quedó atónito con el homicidio de Fernando Villavicencio, político y periodista que aspiraba a la Presidencia de la República por el movimiento Construye (lista 25). Sicarios lo abatieron cuando subió al asiento trasero de una camioneta doble cabina, que abordó luego de participar en un evento de su campaña en el norte de Quito.
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El magnicidio provocó un “terremoto” político que trascendió fronteras. Las investigaciones apuntan a que detrás del hecho estarían grupos de crimen organizado transnacional; aún se desconoce a los autores intelectuales y sus motivaciones.
Hubo más ataques y amenazas contra políticos. En la recta final, de cara al balotaje, los chalecos antibalas se volvieron parte de la indumentaria que usan casi a diario Daniel Noboa y Luisa González.
Todo eso sin contar los numerosos casos de extorsiones, secuestros, homicidios, atentados y múltiples delitos que los ecuatorianos sufren a diario en las calles, en sus lugares de trabajo, escuelas, colegios, universidades y hasta en sus hogares. Por ello, a diferencia de procesos anteriores, en estas elecciones la mayor preocupación de la gente es la inseguridad, según encuestas.
Jorge Tapia de los Reyes, politólogo y máster en Políticas Públicas, señaló que las actuales elecciones son singulares porque es la primera vez que se recurre a la muerte cruzada, mecanismo insertado en la Constitución de 2008; además, por el contexto de inseguridad y por la crisis de gobernabilidad e institucionalidad.
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Explicó que los comicios anticipados ”marcan un antes y un después en la historia republicana de Ecuador”. Se puso en evidencia la permeación que existe en la política nacional de grupos narcodelictivos y de origen ilícito. Incluso periodistas han tenido que abandonar el país por las amenazas. “Esto es un hecho inédito”, dijo.
“Esta escalada de violencia responde a que hemos permitido que grupos del crimen transnacional hayan permeado en las instituciones y que, básicamente, ellos se sientan en control de la sociedad”, lamentó Tapia de los Reyes.
Desde otra perspectiva, Alfredo Dávalos, expresidente de la Asociación Latinoamericana de Consultores Políticos (Alacop), observó que en estas elecciones, más allá de las tragedias y de la abundancia de noticias falsas, hubo sorpresas en la primera vuelta y “parece que primó más el marketing que la política”.
En la campaña electoral “se han visto momentos que están por encima de la propuesta; se está apelando más a la imagen de los candidatos”, comentó Dávalos.
En el día de los comicios de segunda vuelta se levantarán al menos dos encuestas a boca de urna
Una lectura compartida de los expertos es que en estas elecciones históricas ha quedado claro que en la población existe “desidia frente a las organizaciones políticas”, que están en deuda con la formación de cuadros propios. Falta ideología. Por ello, las campañas se han enfocado más en el rostro y personalidad de los candidatos.
El nuevo Gobierno asumirá el poder a mediados de diciembre y tendrá menos de dos años para trabajar, apenas 18 meses, ya que deberá completar el periodo para el que fue elegido Guillermo Lasso (2021-2025). Aunque la ciudadanía demanda soluciones urgentes, el tiempo es escaso; además, la Asamblea Nacional otra vez estará fragmentada, con lo cual la gobernabilidad podría verse nuevamente complicada. (I)
