El 23 de enero de 2019 fue una fecha convulsa para la política venezolana: el jefe del Parlamento, el opositor Juan Guaidó, se juramentó como presidente interino del país desconociendo así el mandato de Nicolás Maduro, quien se había reelecto en 2018 en unos comicios que no fueron considerados ni libres ni justos por gran parte de la comunidad internacional, señalamiento que Maduro rechaza.