Después de ganar su partido en la fase de grupos contra el gigante del fútbol, Argentina, todos los jugadores de Arabia Saudita serán recompensados con un Rolls Royce cada uno. La recompensa es cortesía del príncipe de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman Al Saud, quien les otorgará un Rolls Royce Phantom de RM6 millones a cada uno.