El pasado viernes, la surfista italiana Giulia Manfrini perdió la vida tras ser atacada por un pez espada mientras surfeaba en las aguas de Pulau Masokut, una isla cerca de Sumatra, Indonesia. La deportista de 36 años recorría el mundo buscando nuevos sitios para surfear y era conocida en redes sociales por su pasión por el deporte.

Manfrini falleció a los 36 años mientras practicaba su deporte favorito. Según el testimonio de Lahmudin Siregar, jefe en funciones de la Agencia Regional de Gestión de Desastres de las Islas Mentawai, “De repente, el pez saltó sobre ella y le perforó el pecho. Esta especie es muy peligrosa en caso de contacto directo debido a su capacidad de salto y velocidad”.

El padre de Manfrini reconoció que el impacto del animal marino le causó una herida de “14 centímetros en el pecho”, que habría afectado además al corazón: “Lamentablemente, no se pudo hacer nada para salvar su vida. Estamos totalmente en shock”. A pesar de haber pedido ayuda y ser trasladada rápidamente al centro médico Pei Pei Pasakiat Taileleu, los esfuerzos médicos fueron en vano.

Alexandre Ribas, uno de los testigos y quien rescató a la italiana, relató a medios locales: “Intentamos reanimarla, pero sin éxito”, según difundió la cadena de TV Antena 3.

Los medios indonesios informaron que los encuentros con peces aguja en la zona ocurren de forma ocasional, aunque los casos fatales son extremadamente raros.

Manfrini no solo era surfista, la joven contaba con una licenciatura en Derecho y ha sido campeona en diversas disciplinas deportivas, incluyendo snowboard cross, slalom y Big Air. Además, era instructora de apnea y cofundadora de la agencia de viajes conocida como Awave Travel.

Previamente había tenido un accidente que sufrió mientras surfeaba, donde se cortó el tendón del cuádriceps al chocar contra un arrecife de coral. (I)