En una entrevista radial el mandatario ecuatoriano, Daniel Noboa, anunció que retirará del país a personas privadas de la libertad que son extranjeras. Uno de los primeros países a los que se aplicará la medida será Colombia.

Noboa indicó que alrededor de 1.500 personas son de esa nacionalidad y que tras el ofrecimiento de su homólogo colombiano, Gustavo Petro, de brindar ayuda al país, se los enviará de regreso a quienes tienen condenas de cinco años o más.

“En el momento que los sacamos dejamos de tener egresos”, precisó.

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Indicó que a través de tratados internacionales podrá trasladarlos a la frontera y entregarlos a las autoridades de Colombia. La deportación arrancaría esta semana.

Desde Colombia las reacciones no se hicieron esperar y el ministro de Justicia de ese país, Néstor Osuna, realizó una advertencia ante la medida, aunque también expresó su solidaridad ante Ecuador.

“Si los expulsan, el primer lugar que los están expulsando es de la cárcel, es decir, los están dejando en libertad y al llegar a la frontera, por supuesto, un ciudadano colombiano que llega a la frontera puede llegar a Colombia. Al llegar a Colombia, si tiene alguna deuda pendiente con la justicia colombiana, pues tendrá que ser capturado, y si no la tiene, seguirá su vida en libertad en Colombia”, explicó.

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Osuna aclaró que en caso de tomar ese cambio, las decisiones de la justicia ecuatoriana sobre las condenas de esos reos no tendrán validez y que para que estas la tengan requieren que se dé el proceso mediante una repatriación de presos.

“Si es una expulsión, pues quiere decir que llegan a la frontera y ya dependerá de la situación de cada uno de ellos frente a la justicia colombiana”, añadió.

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En declaraciones a medios de comunicación también señaló que no disponen de la capacidad en Ipiales de tener a 1.500 nuevos reclusos.

Osuna también se refirió al tema en la mañana de este miércoles en una entrevista con Caracol Radio, antes del anuncio de Noboa, en la que reveló que la semana pasada habían recibido una comunicación oficial de la canciller Gabriela Sommerfeld, así como también dialogaron el fin de semana y le precisó que la repatriación de presos “tiene unos trámites que no están pensados en repatriaciones masivas”.

Además especificó que en el 2023 se dieron diez solicitudes de repatriación y tan solo se aprobaron siete.

Osuna explicó que la persona privada de la libertad es la que debe hacer la solicitud para seguir pagando su condena cerca de un familiar que lo pueda visitar. Tras esto, el Gobierno de Colombia debe dar una resolución.

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“La iniciativa proviene del preso, es la persona privada de la libertad la que solicita la repatriación, se la solicita en este caso a las autoridades de Ecuador, Ecuador lo analiza y si lo considera pertinente inicia el trámite diplomático, nos llega a nosotros la solicitud”, aclaró.

Además precisó que la repatriación de los presos tiene un carácter humanitario. (I)