Este miércoles, el exalcalde de Nueva York, Rudy Giuliani, se presentó en la prisión del condado de Fulton, en Atlanta (Georgia), tras la decisión judicial en la causa que se sigue en su contra y contra otras 18 personas por intentar manipular los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 en ese estado.
Otro de los más conocidos en esa causa es el expresidente Donal Trump, que se espera que se presente este jueves.
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Antes de la entrega, los abogados de Giuliani se reunieron con el fiscal de distrito de Fulton, Fani Willis, y negociaron los términos de la fianza fijada en 150.000 dólares.
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Al exalcalde se le tomaron las huellas dactilares, así como las fotografías de su ficha judicial.
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“Me honra mucho estar implicado en este caso porque este caso es una lucha por nuestro modo de vida. Esta imputación no es un ataque solo contra mí, contra el presidente Trump o contra los otros implicados, sino contra los estadounidenses”, dijo a la prensa a la salida de la prisión.
Si algo así le pasa a él, opinó sin mostrar un ápice de arrepentimiento, le puede pasar a cualquiera. “Estoy siendo perseguido por defender a un ciudadano estadounidense como abogado. Otros cinco abogados están imputados. Eso debería dejar claro que esto es un ataque contra la Constitución”, recalcó.
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Con él ya son tres los imputados que se han presentado a la cárcel esta semana. Todos están acusados de formar parte de una conspiración para cambiar el desenlace de las elecciones de 2020 en Georgia recurriendo a diferentes métodos, desde presiones a funcionarios encargados de certificar los resultados hasta intentos de robar datos electorales en un condado rural del estado.
Específicamente, a Giuliani se le acusa de formar parte de un plan para que 16 republicanos de Georgia actuaran como los designados de ese estado para elegir al presidente de Estados Unidos en el Colegio Electoral, en un intento por revertir los comicios a favor de Trump, pese a que el demócrata Joe Biden había ganado en ese estado por un estrecho margen.
Giuliani fue uno de los rostros más visibles en los intentos de Trump por anular los resultados electorales en todo el país.
Uno de los momentos que mejor retrata ese papel fue la rueda de prensa que dio denunciando un supuesto fraude después de las elecciones, en la que se le pudo ver con chorretones de sudor de color marrón en la frente, algo que el público achacó a algún tipo de producto que el exalcalde había usado para tratar de tapar sus canas.
Esa rueda de prensa se produjo a las afueras de Filadelfia, cerca de un crematorio y de una tienda de productos sexuales, y frente a un pequeño negocio de jardinería llamado Four Seasons Total Landscaping, que su equipo confundió con la lujosa cadena de hoteles Four Seasons. (I)