Un satélite de la constelación Starlink de SpaceX fue captado mientras orbitaba la Tierra, luego de sufrir una falla que provocó la pérdida de comunicación y lo dejó fuera de control, rumbo a su desintegración en la atmósfera.

La imagen fue obtenida por el satélite WorldView-3 de la empresa Vantor a solicitud de SpaceX, con el objetivo de evaluar el estado del aparato tras el incidente. El registro se realizó el jueves 18 de diciembre, cuando ambos satélites sobrevolaban Alaska, a una distancia aproximada de 241 kilómetros.

Según SpaceX, el satélite Starlink presentó el miércoles 17 de diciembre una anomalía que causó una ventilación no programada de su tanque de propulsión y la interrupción de las comunicaciones con tierra.

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Desde entonces, el artefacto se encuentra girando sin control y descenderá gradualmente hasta reingresar a la atmósfera terrestre, donde se espera que se incinere por completo en cuestión de semanas.

La imagen captada por WorldView-3 alcanza una resolución de 12 centímetros, lo que permitió observar con claridad la estructura del satélite y confirmar que, en su mayor parte, permanece intacto.

“Nuestro equipo aprovechó las capacidades avanzadas de nuestra tecnología de observación no terrestre para actuar con rapidez y proporcionar a SpaceX información clave sobre el estado del satélite”, señaló Todd Surdey, vicepresidente ejecutivo de Vantor, en un comunicado.

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Los datos recopilados indican que, como consecuencia de la anomalía, el satélite liberó una pequeña cantidad de fragmentos. No obstante, SpaceX aseguró que tanto el satélite como los restos generados no representan un riesgo significativo para otras naves en órbita baja terrestre.

“Esperamos que el satélite y los fragmentos reingresen y se desintegren completamente en las próximas semanas”, indicó Michael Nicolls, vicepresidente de ingeniería de Starlink, en una publicación en la red social X. (I)