Daniel Ortega, en el poder desde 2007, quedó reelegido para un quinto mandato de cinco años, el cuarto consecutivo, en las elecciones generales del 7 de noviembre de 2021. Su esposa, Rosario Murillo, fue elegida vicepresidenta. Fue una victoria previsible, ya que sus siete aspirantes opositores habían sido encarcelados previamente, mientras tres partidos políticos opositores habían sido ilegalizados. La legitimidad de las elecciones de Nicaragua fue puesta en duda por grupos opositores, organizaciones defensoras de los derechos humanos, así como por la Organización de Estados Americanos (OEA), la Unión Europea (UE) y otros Estados.