Tras el suicido de Alan García, el 17 de abril del 2019, Miguel Atala Herrara, amigo y socio del exmandatario, confesó al Equipo Especial Lava Jato que actuó como intermediario de García para que este reciba un millón 312 mil dólares de Odebrecht, a través de la sociedad offshore Ammarin Investment INC.