El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, apareció este viernes caminando y sonriendo en un video y declaró estar “firme y fuerte” en un mensaje en redes sociales, tres días después de someterse a una cirugía de emergencia por una hemorragia intracraneal.

Son las primeras imágenes públicas de Lula, de 79 años, desde el lunes, cuando los médicos detectaron una hemorragia cerca del cerebro, derivada de un golpe en la cabeza que sufrió hace casi dos meses, y lo trasladaron al Hospital Sirio-Libanés en Sao Paulo, donde sigue internado.

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Fue operado con éxito el martes para evitar que el hematoma comprimiera el cerebro, y dos días después se sometió a una nueva intervención para minimizar el riesgo de más sangrados. Su equipo médico afirma que se recupera bien.

“Pido que se queden tranquilos. ¡Estoy firme y fuerte!”, escribió el presidente izquierdista en el mensaje que acompaña el video, en el que agradece por “cada oración y palabra de consuelo” recibidas.

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También dijo que estará “en breve, listo para volver a casa y seguir trabajando”.

En el video se ve al mandatario con un apósito en la cabeza, vestido con ropa de ejercicio azul y zapatillas deportivas, conversando y riendo junto al neurocirujano Marcos Stavale.

Lula “está neurológicamente perfecto, está óptimo”, había declarado el jueves Stavale en una rueda de prensa.

Imagen de “tranquilidad”

Su esposa Rosangela ‘Janja’ da Silva, muy activa en las comunicaciones presidenciales, publicó en Instagram dos fotos de la pareja sonriendo en el Hospital Sirio-Libanés.

“Hoy fue un día de mucha emoción, alegría y agradecimiento por caminar a tu lado. Estoy segura que esa imagen también llevó tranquilidad a todos que tanto se preocupan y quieren al presidente”, escribió la primera dama en un mensaje que acompaña las imágenes.

Lula, que llega a la mitad de su mandato y está a dos años de la elección presidencial de 2026, pasó este viernes a “cuidados semintensivos”, informó en un boletín el hospital.

Según dijo a la AFP una fuente de la presidencia brasileña, el jefe de Estado seguirá en la misma sala pero bajo una observación “en intervalos” y ya no permanente, como fue desde el martes en terapia intensiva.

Se prevé que Lula deje el hospital paulista el lunes o martes de la semana próxima y regrese a Brasilia, donde necesitará “reposo relativo por algunas semanas”, según los médicos. (I)