Nacido en Colombia, ciudadano honorario de Seúl desde 2019, el escritor Andrés Felipe Solano se ha convertido, entre otras cosas, en intérprete para Latinoamérica de la idiosincracia y cultura de Corea del Sur, un país al alza en el imaginario global ya sea por su presencia constante en los noticieros como por la arrolladora fuerza del “hallyu”.