Inglaterra prohibirá hervir langostas, gambas, cigalas, bogavantes y cangrejos vivos y conscientes como parte de una nueva estrategia del Gobierno laborista para reforzar el bienestar animal.

Los ministros señalaron que “la ebullición viva no es un método aceptable para matar crustáceos” y avanzaron que se publicarán directrices con alternativas más humanitarias, como el aturdimiento eléctrico o el enfriamiento previo antes de la cocción.

La medida se apoyará en una ley aprobada en 2022 que reconoce que algunos invertebrados son seres sensibles y capaces de sentir dolor. La práctica ya está prohibida en países como Suiza, Noruega y Nueva Zelanda.

Publicidad

Ben Sturgeon, director de la organización Crustacean Compassion, celebró el anuncio y afirmó que hervir animales vivos “les provoca un dolor insoportable durante varios minutos” pese a que existen métodos alternativos.

La prohibición forma parte de un paquete más amplio de reformas que incluye eliminar las jaulas para gallinas y cerdas, poner fin a la cría de cachorros, consultar la prohibición de collares eléctricos para perros y exigir sacrificio humanitario en piscifactorías.

Las propuestas también endurecen las normas sobre la caza, con restricciones durante la temporada de cría y el fin de la caza de rastro, detallan medios británicos.

Publicidad

Aunque la iniciativa fue criticada por algunos políticos, encuestas muestran un amplio respaldo ciudadano a normas más estrictas de protección animal. (I)