La Fundación Leonardo DiCaprio (LDF), que lucha por políticas inclusivas con el medio ambiente, canalizó subvenciones a través de un grupo de dinero oscuro que luego las transfirió a un bufete de abogados que lidera demandas en contra de compañías petroleras por supuestos engaños sobre el cambio climático, de acuerdo a revelaciones de un medio estadounidense.