Un grupo de mujeres con un bebé de meses de nacido improvisa con plástico un espacio para cubrirse de del sol, de la lluvia, descansar y dormir en la acera, frente a una cárcel de El Salvador. Ellas, al igual que cientos de personas esperan a que sus parientes, arrestados bajo el régimen de excepción decretado desde el 27 de marzo pasado, sean liberados.