Científicos han descubierto más de 900 especies de microbios, la mayoría nunca antes vistas, en muestras de nieve y hielo de los glaciares de la meseta tibetana, lo que supone un indicio más de que apenas hemos arañado la superficie del mundo microbiano y lo que aumenta la preocupación por la propagación de enfermedades a medida que los casquetes polares se derriten por el calentamiento global.