Mario Cujilema, de 56 años, sufrió un accidente doméstico en 2019. Cuando estaba pintando su casa tocó un transformador y se electrocutó. Fue llevado al hospital con heridas graves y quemaduras de tercer grado. Perdió el brazo derecho, la mitad de su pierna derecha y quedó con secuelas físicas con las que lidia hasta ahora.