Pedro José Restrepo Bermúdez nació en Andes (Antioquia, Colombia), el 5 de mayo de 1943. Estudió Ingeniería Mecánica.
Se estableció en Ecuador el 16 de enero de 1970. Vivió desde entonces en Quito con su esposa, Luz Elena Arismendi, y sus tres hijos: Carlos Santiago, Pedro Andrés y María Fernanda.
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En 1988, Carlos Santiago y Pedro Andrés desaparecieron. La búsqueda de sus hijos se convirtió en una lucha simbólica para las familias de los desaparecidos. Acudió cada miércoles, durante 19 años, a la plaza Grande para visibilizar su caso.
En 1998, el Estado ecuatoriano reconoció su responsabilidad y se comprometió a buscar los cuerpos de los menores. Hasta la fecha no aparecen. En la época de su desaparición tenían 14 y 17 años.
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Pedro Restrepo, padre de los desaparecidos hermanos Carlos Santiago y Pedro Andrés, falleció en Quito este martes, 24 de diciembre, a sus 81 años.
Conocido activista por los derechos humanos en Ecuador, enfrentó una batalla personal contra una grave enfermedad respiratoria crónica.
Se encontraba en una situación crítica que requería cuidados médicos intensivos.
En abril pasado, la Alcaldía de Quito concedió la mención Marieta de Veintimilla a Pedro José Restrepo por la lucha y defensa de los derechos humanos y la difícil búsqueda de sus hijos Santiago y Andrés Restrepo, quienes aparentemente fueron detenidos por conducir sin licencia y luego fueron desaparecidos.
Debido a su delicada salud no pudo recibir el reconocimiento personalmente. En su lugar, su hija, María Fernanda Restrepo, fue quien lo representó y aceptó la mención honorífica.
En el 2011, María Fernanda Restrepo presentó Con mi corazón en Yambo, un largometraje documental que relata la historia de la desaparición de sus hermanos.
Un 8 de enero de 1988, cuando ella tenía 10 años, sus padres se fueron de vacaciones y la dejaron al cuidado de sus hermanos Santiago, de 17, y Andrés, de 14. Ese día ella tenía una fiesta infantil y ellos debían recogerla.
Pero llegó la noche y nunca acudieron. “Luego de un año de desconocimiento y angustia descubrimos que ese día, sin razón alguna, mis hermanos fueron torturados, asesinados y desaparecidos por la policía ecuatoriana. Sus cuerpos fueron arrojados en la laguna de Yambo. Nunca los encontramos”, se refiere en el documental. (I)